Llegamos a nuestro primer destino! Ciudad de Bogota, donde viven mas de 9 millones de personas, el transito es caotico ya que hay mucha obra publica y gran cantidad de automoviles. Tambien conviven varias formas de transporte publico: taxis, bucetas (unas combis donde uno no entra parado y tienen 12 acientos) buses (un poco mas grande y altos...) y el Transmilenio, enormes colectivos articulados con fueyes que circulan por carriles exclusivos y tienen estaciones vidriadas cerradas. muy buenos!
Aca nadie resigna un centimetro de calle, todos manejan muy rapidos e incluso el transporte publico que es muchisimo circula muy veloz, salvo en los trancones (embotellamientos).


Cruzamos la ciudad rumbo al sur, a Ciudad Jardin, el barrio donde nos recibiria Edgardo Javier Rubiano Rinta (alias el colombiano, para los chicos de Wolframio, mi equipo de futbol..) y su mama Berta.

Vista desde el Transmilenio en el centro de la ciudad, de fondo  los cerros orientales

Nos esperaban con un plato tipico bogotano, el ajiaco, una sopa tipo guiso con base caldo, papas de la zona, cebollas de diferentes tipos, pollo en hebras, queso y se le agrega guacamole (cilantro, tomate, aji, cebolla colorada, lima, picante, etc.) y crema de leche...

Uf! que delicia! obviamente terminamos re pipones y Edgardo nos cedio su habitacion para una merecida siesta.

Aqui las costumbres en la alimentacion son bien distintas, los desayunos son muy fuertes al igual que los almuerzos y en la noche practicamente no se cena, o se lo hace muy liviano...

Como nos dimos cuenta de esto..? al levantarnos al dia siguiente nos esperaba el desayuno: caldo de carne y verduras con un toque de cilantro, tamales de maiz y carne, arepas (tortillas de maiz) y chocolate caliente con queso adentro...!

Tamales en hoja de platano